miércoles, 19 de diciembre de 2012

Tite le ganó la partida a Benítez

El Corinthians conquistó el Mundial de Clubes tras ganar al Chelsea en el Toyota Stadium gracias al gol del peruano Paolo Guerrero en el minuto 68.

Doce años después de coronarse como campeón del mundo venciendo al Vasco da Gama el Corinthians ha conseguido su segundo entrochado tras imponerse al Chelsea en un encuentro muy disputado, con mucha intensidad, una intensidad que ha sido la base sobre la que creció el cuadro brasileño. Desde el año 2006 cuando Internacional de Porto Alegre sorprendió en la final al Barcelona no se había dado el hecho de que un equipo perteneciente a la Conmebol se hiciera con el título. Liderados por Guerrero, Paulinho y Cassio y dirigidos en el banquillo por Tite el Corinthians ha conseguido un logro poco esperado hace un par de semanas cuando arrancaba el torneo. El Chelsea, por su parte, se despide de Japón con una gran decepción, ya que una de las premisas para consolidar el proyecto de Benítez era conseguir este título.

El Corinthians llegaba a la final después de conseguir una victoria poco brillante, pero sólida ante un Al Alhy que apenas creó peligro. El Chelsea, por el contrario, llegaba después de ganar con más facilidad de la esperada a Monterrey, mostrando una de las mejores imágenes de la temporada.

SC Corinthians Paulista 4-2-3-1 football formationChelsea 4-2-3-1 football formation

Tite salió con el 4-2-3-1 habitual en el que solo cambió a Douglas por Jorge Henrique respecto al once mostrado en semifinales. Benítez, por su parte, también salió con un 4-2-3-1 en el que realizó más cambios respecto al partido anterior. En defensa David Luiz apareció en el eje junto a Cahill, por lo que Ivanovic tuvo que caer sobre la banda derecha en detrimento de Azpilicueta. En el centro del campo Lampard y Ramires ocuparon los puestos en los que jugaron David Luiz y Obi Mikel. En la línea de tres cuartos la novedad fue la entrada de Victor Moses en lugar de Oscar. Desde el principio ya se podían distinguir cuáles iban a ser las claves de esta final: el Chelsea buscaba plantear el juego, aunque sin arriesgar lo más mínimo y el Corinthians buscaba la recuperación para salir a la contra aprovechando la velocidad de los hombres de arriba. Por ocasiones el Chelsea salió vencedor, aunque la sensación que daba el encuentro era que el Corinthians tenía el dominio ante los graves problemas del Chelsea en salida de balón. El Corinthians en este primer tiempo buscó las acciones personales de Danilo y de Jorge Henrique por bandas dejando la zona central para las llegadas de Guerrero, Emerson y Paulinho. El trabajo del delantero peruano no se ciñó únicamente a rematar los centros laterales, sino que fue el principal elemento diferenciador del cuadro brasileño durante el primer tiempo, con constantes caídas a banda que hacían sufrir a los centrales ingleses. Las ocasiones no llegaban, pero la batalla en el centro del campo cada vez fue decantándose de parte del Corinthians.



El mal endémico del Chelsea no es ni mucho menos su técnico y es que la inexistencia de un mediocentro creador estuvo con Di Matteo y está ahora con Benítez. Por primera vez el técnico español se decidió a realizar una prueba que será muy importante para el próximo mes de competición en el Chelsea, jugar sin un pivote fijo. La lesión de Oriol Romeu y la marcha a la Copa África de Obi Mikel hacen que el tecnico español vea reducida la nómina de centrocampistas durante el mes de enero. Ante Corinthians se decantó por Ramires y Lampard en el doble pivote, con el brasileño como medio más fijo, mientras que Lampard, como buen llegador, estuvo más tiempo cerca del área que cerca de Ramires. Corinthians tenía a un compatriota de Ramires, con cualidades muy semejantes, por lo que Tite lo aprovechó para cerrar la vía de salida del brasileño. El despliegue físico de Paulinho a lo largo del encuentro fue brutal en varias fases del juego, en esta presión fue su primera gran actuación. Al impedir la recepción de Ramires Luiz y Cahill se veían obligados a salir en largo sobre Torres. Desde la mediapunta Mata y Hazard bajaban para mejorar la fluidez del movimiento del balón, pero el buen trabajo de Ralf por detrás de Paulinho y las constantes ayudas de los extremos impidieron al Chelsea avanzar metros con regularidad de la mano de sus dos mediapuntas más técnicos. Como tercera vía quedó la de Victor Moses, que sin dar un gran resultado, permitió al Chelsea poder llegar al área y probar a un Cassio que rindió a un nivel excepcional. El Chelsea se acercaba por medio de chispazos de sus hombres de arriba, pero en ningún momento fue capaz de situarse en campo contrario para comenzar a buscar espacios. Las ocasiones llegaron, pero no el juego.

La segunda parte comenzó con un guión distinto al de la primera, y es que el Corinthians se hizo con el balón y, aprovechando la debilidad defensiva del Chelsea, se fue a por el partido.



A partir de la presión realizada durante la primera parte el Corinthians fue capaz de recuperar el balón y establecerse con regularidad en campo contrario. La figura de Paulinho tomó importancia en un segundo rol: dominador del centro del campo. Partía desde el mediocentro junto a Ralf, y acababa llegando al área a la altura de Emerson. Pero a parte de su movilidad y llegada la calidad para servir balones a los extremos fue clave para abrir espacios en la defensa londinense. Emerson también dejó su lugar en el centro y comenzó a caer sobre la banda derecha, intercambiando su posición con Danilo. Arriba Guerrero tenía plena libertad para moverse por donde quisiera. Jorge Henrique, por banda izquierda, quedó más estático, realizando un doble trabajo: equilibrador en defensa y profundizador en ataque. Los laterales no subían con mucha regularidad aunque Fabio Santos dejó verse durante algunos momentos de esta segunda parte. Este sistema ofensivo permitía al Chelsea lanzar rápidamente unas contras que cerca estuvieron de acabar en gol, pero Cassio de nuevo respondió con nota. El tiempo pasaba y el dominio brasileño era cada vez mayor, pero las ocasiones se limitaban a disparos desde fuera del área, que únicamente provocaban algún susto de poca importancia a la defensa del Chelsea. A los 69 minutos este dominio se materializó en gol gracias a un remate de Guerrero al aprovechar un rechace en el área. El Corinthians había encontrado el gol y durante los siguientes veinte minutos debía limitarse a hacer lo realizado en el primer tiempo.

El Chelsea apenas tuvo reacción y es que si el centro del campo no existió en la primera parte, en esta segunda ni apareció y el balón colgado al área se convirtió en la tendencia de estos últimos minutos de partido. Benítez se decidió a dar entrada en el minuto 73 a Oscar en lugar de Victor Moses, pero la inexistencia de juego entre líneas impidió que este cambio tuviera buen resultado. Con claras intenciones de colgar balones Azpilicueta entró en lugar de Ivanovic, en el minuto 83. El español se situó como carrilero derecho, dejando el centro para Mata y Oscar. La entrada del ex del Osasuna sí hizo que estos centros laterales tuvieran más sentido y Torres estuvo cerca de empatar el partido, pero se encontró con Cassio. En el 87 Benítez agotó los cambios dando entrada a Marko Marin en lugar de Hazard. En ese momento Tite decidió realizar su primera sustitución para dar entrada a Martínez en lugar de Guerrero. El último cambio que realizó fue la entrada de Wallace en lugar de Emerson, para asegurar la defensa ante la cantidad de balones aéreos que llegaban al área brasileño. Un gol anulado a Torres y un remate al palo de Mata fueron los últimos coletazos que dio un partido que en su tiempo de descuento vio como Cahill era expulsado.

Con este triunfo el Corinthians se hace con el título por segunda vez igualando al Barcelona como equipo con más títulos mundialistas.

Cassio fue elegido mejor jugador del torneo, seguido por David Luiz y Guerrero. El premio al juego limpio fue este año para Monterrey.

domingo, 9 de diciembre de 2012

Bayern Munich: Recuperar el trono en Alemania después de dos años es el principal objetivo

FC Bayern München 4-2-3-1 football formation

El Bayern tiene ante sí una temporada complicada, ya que otro año de dominio del Dortmund sería inaguantable en el Allianz. El buen trabajo realizado en verano ha hecho que el comienzo de la temporada les haya situado en una posición inmejorable para hacerse con el título. 41 puntos de 48 posibles cediendo tan solo una derrota y dos empates son sus increíbles números en Bundesliga. Pero estos números se convierten en más increíbles cuando vemos que el segundo clasificado, el Bayer Leverkusen, está a once puntos y su bestia negra en las últimas temporadas, el Borussia Dortmund está a catorce en tercera posición. Además en Champions el conjunto bávaro ha accedido a Octavos de final como líder de grupo. La principal novedad para conseguir estos resultados está en la amplitud de la plantilla. El trabajo realizado en verano por la dirección deportiva ha dado sus frutos. Manteniendo la columna vertebral de un equipo que consiguió el pasado año el acceso a la final de la Champions League ha hecho cinco fichajes estratégicos que hacen mejorar al equipo inicial y que sobre todo aportan aire desde el banquillo. Los fichajes de Dante y de Javi Martínez hacen subir el nivel del once titular. Mientras que las llegadas de Shaqiri, Mandzukic y Pizarro permiten dar descanso a jugadores importantes como Muller o Ribery y que impiden recordar que Mario Gómez comenzó la temporada lesionado y que Robben todavía continúa recuperándose. El sistema utilizado por Heynckes es un 4-2-3-1 en el que los laterales destacan por su profundidad en ataque, los centrales gracias a su buena salida de balón llegan a la aa con los extremos que tienden a irse hltura de los mediocentros. Por delante aparece un Kroos que combinacia el centro a los que se les suma Schweinsteiger. Arriba actúa un punta con buena movilidad, además de buen juego aéreo para rematar los centros laterales.


En fase ofensiva  los aspectos más destacados del Bayern son la verticalidad de su juego, las pocas combinaciones entre líneas y la omnipresencia de Schweinsteiger. El cuadro bávaro es capaz de triunfar en partidos en los que tiene que tener el dominio del balón y en los que no. Su juego se basa en buscar rápidamente a los jugadores de las bandas para, mediante diagonales hacia adentro, buscar bien el disparo a portería bien el centro lateral. Ribery suele ser, ante los problemas de Robben, el jugador encargado de desbordar hacia el centro continuamente aprovechando las buenas incorporaciones por banda de Alaba. Pero si retrasamos la posición nos encontramos con la figura clave del Bayern, Schweinsteiger. El jugador alemán es el hombre sobre el que se cimenta todo el juego, tanto ofensivo como defensivo. Los medios del cuadro del Allianz no están obligados a aparecer constantemente en la generación de juego, su rol suele ser el de aparecer una o dos veces por jugada, teniendo que ser claves sus asistencias hacia los mediapuntas. Bastian asume toda la labor de movilidad en el centro del campo, mientras que Javi Martínez está más fijo, en ocasiones un poco desubicado. Schweinsteiger es el encargado de aparecer en salida de balón, buscando  como primera opción el pase a las bandas y como segunda el pase interior a los delanteros. En llegada al área también aparece con constancia buscando segundas jugadas, gracias a su buen disparo lejano. Javi Martínez está en camino de asumir esa importancia. En salida de balón se sitúa por delante de Schweinsteiger ofreciéndose en caso de que el alemán no encuentre una vía clara de pase. Cuando Bastian llega a rematar Javi es el encargado de mantener la posición. Por delante aparece la figura de Kroos. El contexto no es el más favorable para un Kroos que tiene poca presencia con balón. Su rol es el de llegador y el de acompañante en salida de balón bajando a recibir para generar superioridad. Entre líneas no aparece todo lo que le gustaría siendo de importancia en las combinaciones interiores con los extremos.


En fase defensiva la importancia de los medios es mayor que en la defensiva. El vuelo que tienen tanto Schweinsteiger, como Javi Martínez, como Luiz Gustavo permite al equipo incorporarse al ataque con muchos hombres y sostenerse en el centro del campo con la presencia de un mediocentro. El juego a la contra del Bayern es uno de sus fuertes, en gran medida gracias al trabajo de su centro del campo. Como vemos en la imagen la intención es recuperar el balón cuanto antes y si para ello hay que situar a los dos mediocentros por delante de la línea del centro del campo, se los sitúa sin ningún problema. Kroos actúa sobre la primera línea de salida, en este caso sobre los centrales, y Schweinsteiger y Javi Martínez acompañan a su medio correspondiente para evitar que se dé la vuelta y buscar la recuperación rápida para aprovechar la velocidad de sus extremos. Cuando esta línea es superada   y sobre todo cuando encuentran la espalda a los laterales después de perder un balón en ataque el Bayern sufre para cerrar. En defensa la llegada de Dante hace subir el nivel de una línea que sufría con la lentitud de Badstuber y con las pérdidas de posición de Boateng.

Ahora vamos a analizar el equipo línea por línea:


  • Portería: Manuel Neuer es el titular indiscutible de la portería del Allianz. Las dudas que empiezan a llegar sobre su titularidad en la selección alemana no llegan en el Bayern. Ha encajado solo seis goles en dieciséis partidos de Bundesliga y seis en seis partidos de Champions. Tom Starke ha llegado esta temporada procedente del Hoffenheim para ser su sustituto.

  • Defensa: La línea formada por Alaba, Dante, Boateng y Lahm es la más utilizada por Heynckes esta temporada, y será más utilizada tras conocerse la baja de Badstuber para todo lo que queda de temporada. Tardó en hacerse con el puesto, pero el gran rendimiento mostrado la pasada temporada y las buenas actuaciones realizadas en los últimos partidos, han permitido a David Alaba volver a ocupar el lateral izquierdo. Su físico de centrocampista con recorrido le permite llegar al doblaje en banda con Ribery. Badstuber era su principal sustituto, por lo que tras la lesión Heynckes tendrá la opción de cambiar de banda a Lahm o a Rafinha o apostar por Contento, como hizo en el enfrentamiento ante el BATE Borisov. Precisamente los dueños de la banda derecha son ellos dos. El alemán es el titular gracias a la constancia que muestra en cada partido y al liderazgo que asume en defensa. Se encarga más de equilibrar defensivamente, mientras que Alaba es el que se incorpora con más asiduidad al ataque. Rafinha llegó con la vitola de titular al Bayern, pero el buen rendimiento de Alaba en banda izquierda y sus problemas de adaptación al puesto le están impidiendo actuar con regularidad. La defensa queda para Boateng y Dante. La llegada de Dante a la defensa le ha permitido dar un salto de calidad al equipo ya que asume un liderazgo que no eran capaces de asumir ni Badstuber, ni Boateng. Es un central bastante completo, con una salida de balón aceptable, buena movilidad y va bien por alto. Boateng aparece como su acompañante. Es más rápido, pero tiende a perder más la posición. Van Buyten es el único central nato que le queda a Heynckes en banquillo. Con problemas para hacerse un hueco en el once, siempre aporta cuando tiene su oportunidad. Destaca por su juego aéreo. Otra opción que baraja el técnico alemán es retrasar la posición de dos mediocentros, como son Tymoshchuk y Javi Martínez. 

  • Centro del campo: Schweinsteiger y Javi Martínez conforman el doble pivote titular del equipo bávaro. Con poca presencia en el juego de elaboración el equilibrio defensivo y la primera salida de balón que deben de aportar es clave para el Bayern. Javi Martínez está actuando como medio más fijo. Se encarga de equilibrar al equipo y de salir al corte en acciones de contra. De no estar Schweinsteiger posiblemente actuaría con mayor libertad en campo contrario. Bastian actúa como medio más móvil, apareciendo en la base de la jugada y finalizándola en campo contrario. También cae a las bandas y rompe líneas por dentro asociándose con los jugadores de tres cuartos. Luiz Gustavo aparece como principal alternativa al puesto. Es un centrocampista brasileño con mucha movilidad, buen trabajo en las ayudas y buena salida de balón. Otra opción es la de Tymoshchuk. Destaca por su trabajo defensivo, aunque carece de una buena salida de balón. Por delante Kroos es el dueño de la mediapunta. Desde la llegada de Heynckes está teniendo la confianza necesaria para haber desbancado del puesto a Muller. Su trabajo es el de ayudar a los mediocentros, combinar rápidamente con los extremos y buscar la profundidad mediante el pase a la espalda de la defensa o buscando portería. Muller es su alternativa. Tiende más a buscar la superioridad por fuera que por dentro. Por bandas Ribery y el propio Muller son los titulares después de los problemas físicos que arrastra Robben. El francés es el líder del equipo. A partir de él comienza el Bayern a crear verdadero peligro con sus rápidas diagonales encarando al lateral. Muller es útil en las contras gracias a su verticalidad en espacios vacíos. Shaqiri es el único extremo suplente con el que cuenta en plantilla. La apuesta de futuro por este joven suizo puede dar réditos muy positivos al Bayern en próximas temporadas. La opción de adelantar la posición de Alaba y de Rafinha es también utilizada por Heynckes.

  • Delantera: Con el regreso de Mario Gómez después de una larga lesión las incógnitas sobre el poseedor del puesto son muy amplías. Mandzukic está siendo el máximo goleador de la Bundesliga hasta este momento. El croata combina a la perfección la movilidad, la asociación y el poderío por alto para ser el delantero de moda de esta temporada en Alemania. Mario Gómez comienza a tener minutos, aunque tendrá que pelear más de lo esperado por hacerse con el puesto. Sus cifras goleadoras de las últimas temporadas son su principal aval. Pizarro también está rindiendo a un buen nivel, más alto de lo esperado. Sin anotar tantos goles como Mandzukic también se vale de su movilidad para abrir espacios a los jugadores de segunda línea.   

jueves, 6 de diciembre de 2012

Helton aúpa en la clasificación al PSG

La nevada de Zagreb, la derrota del City... Estas son las mejores imágenes de todos los encuentros disputados este martes en Liga de Campeones.

El PSG acaba la primera fase consiguiendo un liderato de grupo, esperado a principio de temporada, pero menos conforme fue avanzando. El partido ante el Oporto era clave para decidir cómo se repartirían franceses y portugueses las dos primeras plazas del grupo A. Al PSG  solo le valía la victoria, mientras que el Oporto podía especular con un empate. Un error de Helton a disparo de Lavezzi dio la victoria al cuadro local en un partido muy disputado.

Paris Saint-Germain 4-2-3-1 football formationFutebol Clube do Porto - SAD 4-3-3 football formation

En el Parque de los Príncipes PSG y Oporto llegaban con la intención de conseguir el liderato del grupo y con la tranquilidad de tener asegurado el pase a Octavos de final. Ancelotti salió con un 4-2-3-1 en el que sorprendió la suplencia de Verratti en el centro del campo, dando entrada a Matuidi y Chantome para formar un doble pivote. En la línea de tres mediapuntas Menez actuó en el centro y en la banda izquierda lo hizo Pastore. Pereira, por su parte, salió con un 4-3-3 sin ninguna novedad. El partido, desde el comienzo, mantuvo una dura pugna en el centro del campo para hacerse con el balón y buscar a sus hombres de arriba para que decidieran ante la portería. El PSG salió muy presionante, con Matuidi y con Chantome adelantando su línea por delante del centro del campo para ir retrocediendo según avanzaba el Oporto. La salida, al no estar presente Verratti, la realizaron por banda. La entrada de Pastore en la izquierda obligaba al PSG para salir en esa banda con la ayuda de Maxwell. Pastore retrasaba su posición y partir de ahí comenzaba a crecer el juego parisino. Por la izquierda Maxwell le doblaba para profundizar por banda. Por el centro Menez buscaba la recepción a la espalda de Fernando para combinar con Ibrahimovic. Como última opción estaba el cambio de juego hacia Lavezzi, una vía de salida utilizada para las salidas a la contra, buscando la espalda al siempre ofensivo Alex Sandro. A pesar de la multitud de vías de salida pocas veces conseguían llegar a la portería de Helton en situaciones ventajosas. Matuidi y Chantome no aportaban en salida, pero su trabajo fue clave en esa batalla por hacerse con el centro del campo. A los 29 minutos el cuadro local consiguió adelantarse con un remate de Thiago Silva al saque de una falta.


Como hemos dicho la batalla en el centro del campo fue el punto a partir del cual se desarrolló el partido. El Oporto intentó proponer desde atrás, pero el PSG se hizo fuerte impidiendo esta salida por dentro, con un gran trabajo de Matuidi y de Chantome que hicieron que no se notara la superioridad numérica del Oporto en esta zona. Fernando era el encargado de aparecer en la primera línea, situándose por momentos entre centrales, Moutinho quedaba algo más adelantado, siendo el principal receptor y Lucho González adelantaba su posición para combinar entre líneas con James Rodríguez y Varela y llegar a rematar desde segunda línea. La presión en el centro del campo impidió al Oporto salir de esta forma y asentarse en campo contrario. Ante esta situación el cuadro portugués tuvo que apostar por los chispazos de sus jugadores de arriba. Jackson Martínez retrasaba su posición y recibía el pase de Fernando o de Moutinho, éste de espaldas combinaba con los extremos o con Lucho, que aparecían por dentro, y, mediante rápidas combinaciones, optaban por buscar el pase a la espalda de la defensa o abrir a las bandas para que los laterales profundizaran y buscaran el centro lateral. En una rápida combinación llegó el empate por medio del propio Jackson Martínez. El partido volvía al punto inicial en el que el Oporto era primero de grupo y en el que no había un dominador claro.

La segunda parte comenzó como acabó la primera, con una batalla cada vez más intensa en el centro del campo, de la que el PSG cada vez salía mejor parado. La superioridad física de Matuidi y de Chantome poco a poco fue mermando al medio campo portugués y los balones divididos comenzaron a caer en su mayoría del lado del cuadro francés. Después de varias llegadas el dominio local se concretó con el gol de Lavezzi en otra jugada a balón parado. El disparo del argentino provocó un error de Helton que marcaría el resto del partido. A partir de este momento el dominio del encuentrovolvió a ser de un Oporto que cerró al PSG, pero que apenas pudo crear ocasiones.


El Oporto atacó con todo, dejando en su campo únicamente a los centrales y, en ocasiones, al medio más defensivo. Moutinho situó la base de la jugada en campo contrario. Lucho se situó como mediapunta combinando con Varela y con James Rodríguez, que ya se quedaron jugando por dentro. Por fuera los laterales se hicieron con la banda por completo. Arriba la movilidad de Jackson Martínez pasaba por ser el detonante del posible empate del Oporto ante la cantidad de desmarques que tiraba a la espalda de la defensa. Lucho González dispuso de la mejor ocasión para empatar el partido, en el minuto 70, con un disparo que se marchó lato, tras un rechace de Sirigu en el mano a mano con Jackson Martínez. Hasta ese minuto Pereira no decidió hacer cambios. Defour entró en lugar de Fernando. El belga se situó a la altura de Moutinho y la salida de balón mejoró. La cantidad de jugadores del Oporto en campo contrario cada vez era mayor. Para equilibrar el centro del campo Ancelotti dio entrada a Verratti en lugar de Lavezzi. El PSG pasó a jugar con un 4-3-3, con el italiano como pivote dejando a Matuidi y a Chantome por delante. La banda derecha pasó a ser ocupada por Menez. Con este cambio el PSG pasó a controlar con menos apuros los ataques de un Oporto que comenzaban a limitarse a centros laterales.En el minuto 85 Atsu entró en lugar de Varela buscando la electricidad del chaval para desbancar a la sólida defensa francesa.El ghanés se situó en la banda derecha. Por la banda izquierda antes había entrado Abdoulaye Ba en lugar de Alex Sandro. Pereira buscó el desborde por bandas para empatar el encuentro, pero el marcador no se movería más. Ancelotti dio entrada en los últimos minutos a Nene en lugar de Pastore. El encuentro llegó al final con un 2-1 que da el pase al PSG como líder de grupo.

Con esta victoria del PSG el grupor A se cierra con la victoria del equipo francés con quince puntos, quedando el Oporto segundo con trece. Por detrás el Dinamo Kiev con cinco irá a la Europa League. Con un punto cierra el grupo el Dinamo Zagreb, eliminado de cualquier competición.

Dos duelos por todo lo alto

Gran tarde- noche de sábado la que se nos presentaba tanto en Alemania, como en España, con enfrentamientos directos entre equipos que ocupan posiciones altas en sus respectivas ligas y que mantienen una dura rivalidad. Los duelos entre Bayern y Borussia explican en los últimos años el desenlace de las competiciones nacionales en Alemania. La amplía diferencia con la que llegaba el Bayern hizo que este duelo fuera un poco más descafeinado, aunque mantuvo su interés. En España Real Madrid y Atlético Madrid llegaban en una situación extraña en los últimos años, con los rojiblancos por delante en la clasificación, y con mejores sensaciones. A pesar de esta mejora el Madrid apenas sufrió para batir al Atlético y continuar la racha de doce años sin conseguir ganar a su máximo rival a nivel local.                

                     BAYERN MUNICH 1 - BORUSSIA DORTMUND 1 



En el Allianz Arena se enfrentaban los dos principales aspirantes al título de liga a principio de temporada, aunque a estas alturas de la distancia de puntos entre ambos parezca demasiado excesiva como para ser remontada.

FC Bayern München 4-2-3-1 football formation Borussia Dortmund 4-2-3-1 football formation

Heynckes salió con su 4-2-3-1 habitual en el que dio entrada a Badstuber en el eje de la defensa en lugar de Boateng y a Mandzukic en la delantera en lugar de Pizarro. Klopp, por su parte, también salió con un 4-2-3-1 en el que sus principales novedades fueron la entrada de Bender en el once en lugar de Kehl y de Kuba Blaszczykowski actuando en la mediapunta, dejando la banda derecha para Gotze.  El partido en su primera parte estuvo bastante igualado y muy cerrado. El Bayern intentaba proponer saliendo desde atrás, mientras que el Dortmund buscaba presionar la salida de balón para crear peligro a la contra. El cuadro local sufrió mucho en los primeros minutos de encuentro cuando era incapaz de salir por fuera y por dentro Javi Martínez no conseguía conectar con Schweinsteiger ni Kroos. El Borussia apenas dispuso de ocasiones ante la portería de Neuer. Pero si por algo se distinguió el primer tiempo fue por el miedo a perder por parte de los dos equipos. Al Bayern le valía el empate, puesto que continuaría manteniendo la distancia de once puntos, mientras que el Dortmund quería dejar una buena sensación, aunque no se correspondiera con una victoria. La lesión de Badstuber fue la noticia negativa del primer tiempo ya que se perderá gran parte de la temporada. En su lugar entró Boateng, que desplazó a Dante al puesto de central zurdo.

               
Una de las principales novedades en el planteamiento de Klopp fue la aparición de Blaszczykowski por el centro dejando la banda para dos jugadores con más tendencia a jugar en esa zona, como son Gotze y Reus. El polaco fue clave para frenar al Bayern en los primeros minutos. Si hay algo claro en el equipo local es el peligro que tiene su banda izquierda, tanto en salida de balón, como en profundidad. El dos contra uno de Ribery y de Alaba es una de las principales vías que tiene el equipo de Heynckes para crear peligro. La posición de Blaszczykowski estaba predestinada para cerrar esa zona. El Dortmund defendió por acumulación y con agresividad, una agresividad que obligó al Bayern a tener que cambiar de plan ante los problemas que tenía en cada salida. Kuba se sumaba a Gotze y a Piszczek que salía con facilidad de su zona para acompañar en cualquier momento a Ribery. Desde el centro del campo llegaba la ayuda también de Sven Bender, que se encargaba de bascular todo el sistema defensivo de un costado a otro, evitando las sorpresas del Bayern con cambios rápidos de juego. El encargado de cerrar los cambios de juego sobre Muller era Gundogan ayudado por Reus que limitó en gran medida las apariciones en ataque de Lahm. Ante esta situación el Bayern se vio obligado a salir en largo sobre Mandzukic para crear peligro a partir de segundas jugadas. El Borussia amenazaba cada pérdida de los centrales con la verticalidad de los tres mediapuntas y la siempre peligrosa presencia de Lewandowski en el área.


Heynckes también presentó una novedad interesante durante los primeros minutos de partido adelantando la posición de Schweinsteiger y dejando a Javi Martínez solo en la base de la jugada. Fue un cambio temporal que mediada la primera parte se anuló ante los problemas que estaba causando al equipo. Los problemas para salir por la banda izquierda obligaban al Bayern a salir por dentro, teniendo en Javi Martínez a su único jugador para hacerlo. El ex del Athletic Bilbao se tenía que enfrentar a Bender y a Gundogan y no conseguía progresar con garantías de triunfo. Su principal apoyo fue Dante, situándose a su altura, pero no logró entrar en contacto con Schweinsteiger y Kroos. Con la vuelta al sistema habitual la salida mejoró al aparecer el Bayern en la base de la jugada con dos hombres. Esta situación lo que propició fueron más balones largos a un Mandzukic que no llegó a encontrarse en el partido victorioso ante un Subotic que le ganó en los duelos por alto. Ribery intentó liderar al equipo apareciendo en todas las zonas, pero el buen dispositivo táctico del Dortmund le impidió progresar.

En la segunda parte los dos equipos tuvieron menos problemas para llegar arriba y es que optaron por jugar directo sobre los delanteros. Buscaron la forma más efectiva de llegar arriba sin arriesgarse a perder el balón en zonas peligrosas. Los duelos entre Mandzukic y Subotic y entre Lewandowski y Dante se sucedieron durante los primeros minutos. Las mediapuntas de los dos equipos comenzaron a aparecer en las segundas jugadas y una figura por encima de las demás, la de Weidenfeller comenzó a crecer conforme avanzaban los minutos. El Bayern consiguió crear más peligro con centros laterales buscando a Mandzukic o algún rechace que remataran Kroos o Schweinsteiger. El portero del Dortmund estuvo imperial por alto para salvar los balones aéreos. El Dortmund buscó las salidas a la contra por las bandas para llegar a la meta de Neuer. La verticalidad de Blaszczykowski y de los dos laterales y la clase de Gotze y de Reus pusieron en apuros a la defensa local que se quedó cerca de encajar el primer gol con un remate de Hummels que despejó a corner Neuer. El partido cada vez se abría más y que llegara el primer gol era cuestión de tiempo. En el minuto 67 el Bayern consiguió adelantarse en el marcador gracias a un disparo lejano de Kroos al que no pudo llegar Weidenfeller. El Borussia reaccionó y buscó el empate. Klopp dio entrada a Perisic en lugar de Blaszczykowski para situar a Gotze en la mediapunta y tener mayor desborde por banda. En la siguiente jugada, en un corner, llegó el empate. Gotze se aprovechó de una serie de rechaces en el área para poner unas tablas que dejaban la clasificación igual que antes del partido. El Bayern buscó el gol dando entrada a Mario Gómez en lugar de Mandzukic. La figura de Weidenfeller fue demasiado grande para un Bayern que suma su segundo empate de la temporada. Klopp dio entrada en el minuto 81 a Santana en lugar de un Subotic que se marchaba lesionado. En el 90 agotó los cambios con la entrada de Schieber en lugar de Gotze para acabar el encuentro con un empate que no mejora su situación en Bundesliga, pero que, al menos, no la empeora.

Con este empate el Bayern Munich continúa líder con ocho puntos de ventaja sobre el Bayer Leverkusen. Tercero es un Borussia Dortmund que se encuentra a tres puntos del Leverkusen y a once del Bayern Munich. Por detrás tiene al Schalke 04 a dos puntos.

                    REAL MADRID 2 - ATLÉTICO MADRID 0

El lanzamiento de Cristiano bajó así tras superar la barrera.

Apenas una hora después de finalizar el partido en el Allianz Arena daba inicio el derbi madrileño en el Santiago Bernabéu. Doce años sin ganar era muchos para un Atlético que llegaba  este año por delante del Real Madrid en la clasificación y en mejor forma que un equipo local que llegaba con muchas dudas tras la derrota inesperada ante el Betis la pasada jornada.

Real Madrid C.F. 4-2-3-1 football formationC. Atlético Madrid S.A.D. 4-4-1-1 football formation

Mourinho salió con su 4-2-3-1 habitual en el que apostó por Ozil en la mediapunta en detrimento de Modric. Simeone, por su parte, sorprendió al salir con un 4-4-1-1 con la entrada de Diego Costa por detrás de Falcao. Koke y Cata Díaz fueron las otras novedades en el once rojiblanco. La entrada del central argentino como lateral izquierdo sorprendió en la previa del partido debido a unas molestias de Filipe. El encuentro comenzó bastante igualado, con mucha tensión y con pocas acciones de ataque largas por parte de ninguno de los dos equipos. El Real Madrid sufría para salir desde atrás con el balón jugado, mientras que el Atlético situó la línea de cuatro centrocampistas por detrás del círculo central y dejó a Falcao y a Diego Costa adelantados para que presionaran la salida madridista.


El primer cuarto de hora estuvo dominado por el Atlético Madrid gracias al sistema para impedir la salida por dentro del Real Madrid. Falcao y Diego Costa actuaron sobre Ramos y Alonso, los dos jugadores más técnicos en esta faceta, con Koke y Arda Turan cerrando a sus respectivos laterales para impedir la salida por los costados. Mario Suárez y Gabi situaron más atrás una línea de centro del campo que permitió al Madrid avanzar hasta su campo, cuando entonces salían a presionar. Por detrás de ellos se encontraba un Ozil con pocas opciones de aparecer. Pedía el pase a la espalda de los mediocentros, pero un balón entre ellos podía convertirse en una pérdida importante, por lo que el alemán debía de retrasar su posición si quería aparecer. Por las bandas Ronaldo sí tuvo un par de jugadas de desborde que la defensa rojiblanca solventó con más o menos apuros. Di María se encontró en una situación parecida a la de Ozil y es que sus continuas diagonales hacia adentro en pocas ocasiones llegaron a buen puerto. Si bien el Madrid no creó excesivo peligro, tampoco perdió ningún balón que hiciera temer a la defensa. Primer cuarto de hora de dominio atlético que finalizó con un lanzamiento de falta soberbio de Cristiano Ronaldo al que Courtois no pudo llegar. El Madrid se adelantó en el marcador y los apuros para llegar al área rojiblanca fueron menos al tener ventaja.

Por banda izquierda encontró una vía de salida interesante para desinflar la presión del Atlético y evitar pérdidas, aunque apenas llevara peligro a la meta de Courtois. Ramos y Alonso cayeron sobre el costado zurdo, impidiendo que el marcaje de Diego Costa y de Falcao fuera tan férreo. Todo el carril hasta el centro del campo quedaba para que Coentrao avanzara metros mediante conducciones individuales y la presencia de Ronaldo a partir de allí dotaba al Madrid de numerosas opciones para continuar una jugada que casi siempre acababa cortada por el centro del campo atlético o con algún centro lateral que sacaban los centrales.


El transcurso del partido iba asumiendo el guión que Simeone esperaba. El Atlético era superior en el centro del campo y el Madrid era incapaz de llegar arriba con claridad y con regularidad. El único punto negativo, y tanto, para el técnico argentino era el gol de ventaja con el que no contaba y que el Madrid no había merecido. Esta desventaja obligaba al Atlético a tener que plantear un plan en ataque para el que no estaba preparado. En ningún momento del encuentro el equipo rojiblanco fue capaz de poner en aprietos a Casillas. Su juego ofensivo se basó en el balón largo sobre Falcao y que el colombiano decidiera. La presencia de Diego Costa podría haber sido positiva para el Tigre de no haberse perdido en guerras que no dieron réditos positivos a su equipo. Pepe y Ramos solventaron con solvencia la papeleta de parar al mejor delantero centro del mundo. El ataque comenzaba y acababa en Falcao y es que ni Arda Turan ni Koke combinaban entre líneas para intentar crear algún espacio. La baja, además, de Filipe lastró las entradas de un equipo que se encontró con Cata Díaz en la banda izquierda y con un Juanfran amenazado en cada jugada de ataque por Ronaldo en la derecha.

La segunda parte comenzó con un Atlético Madrid que adelantó líneas en defensa, salió más presionante, pero sin ningún plan para atacar la portería. Koke y Arda Turan comenzaron a aparecer con diagonales hacia adentro, pero la inexistencia de un mediapunta en el centro  y de los laterales doblando por banda les impedía seguir progresando ante la multitud de jugadores madridistas que encontraban a su paso. Arriba Falcao y Diego Costa continuaron sin recibir balones en posiciones ventajosas y apenas pudieron disparar con peligro a portería. Este cambio de tendencia le vino mejor al Madrid. El equipo rojiblanco empezó a dejar espacios más amplios entre mediocentros y centrales y la movilidad entre Benzema, Ozil y Di María creció. Alonso dominó la salida con desplazamientos siempre en largo hacia una de las dos bandas. Las diagonales de Cristiano y de Di María permitían entrar en juego a Ozil y a Benzema para encarar portería después de rápidas asociaciones. Khedira también avazó su posición y tuvo alguna llegada que complicó la vida a la defensa atlética. El dominio blanco fue a más hasta que en el minuto 66 se concretó con un gol de Ozil que se aprovechó de los desajustes en la defensa rojiblanca para anotar el segundo y definitivo gol del partido. A partir de este momento el nivel del juego disminuyó y solo las diagonales de Ronaldo hacían presagiar la posible llegada de otro tanto. Mourinho comenzó con las sustituciones dando entrada a Callejón en lugar de Di María, en el minuto 70. Tres minutos después Tiago y Adrián entraron en el Atlético en lugar de Gabi y de Koke. La entrada de Raul García en lugar de Arda Turan fue la última sustitución que realizó Simeone. Un par de disparos al palo de Cristiano Ronaldo fue lo más reseñable de estos últimos minutos. Mourinho agotó las sustituciones dando entrada a Modric y a José Rodríguez en lugar de Ozil y de Benzema respectivamente.

Con esta victoria el Real Madrid continúa tercero, recortando las distancias con el Atlético, a cinco puntos y manteniéndolas con el Barcelona, a once. Por detrás tiene a cuatro puntos al Betis. El Atlético es segundo, cinco puntos por delante del Real Madrid y seis por detrás del Barcelona.

viernes, 30 de noviembre de 2012

Primeras sensaciones de la era Benítez



Dos años sin entrenar son muchos para cualquier entrenador y más si ese entrenador tiene un currículum tan envidiable como el de un Rafa Benítez que tiene entre otros logros una Champions, dos ligas españolas y un Mundial de Clubes. La despedida de Di Matteo el martes pasado por la noche después de una derrota ante la Juventus que le deja prácticamente eliminado de la Champions propició la entrada en escena del técnico madrileño. Con carácter interino hasta final de temporada llega un Rafa Benítez que tendrá como máximos objetivos luchar por la Premier League y ganar el Mundial de Clubes.

En sus dos primeros partidos al mando del banquillo londinense pocas conclusiones positivas se pueden sacar de un Chelsea que continúa con importantes problemas en la creación de juego mediante posesiones largas. El principal problema de Di Matteo en este comienzo de temporada era la salida desde atrás, ya que Ramires y Obi Mikel eran incapaces de hacer llegar el balón con un mínimo de limpieza a los mediapuntas, además de las constantes pérdidas que tenía en este tipo de transiciones. Benítez ha conseguido minimizar este número de pérdidas, aunque la salida de balón sigue siendo un debe para su equipo. Otro problema que fue a más conforme avanzaba la temporada fue la cantidad de goles encajados. Hasta el domingo pasado el Chelsea no dejaba su portería a cero desde el 22 de septiembre en Premier League habiendo encajado once goles en siete partidos. En Champions las cifras son igual de sangrantes, y es que en los cinco partidos disputados solo ha conseguido mantener la portería a cero en su enfrentamiento ante el Nordsjaelland habiendo encajado nueve goles en los otros cuatro partidos. Unas cifras que lastran la marcha de un equipo que por encima de todo se basa en la solidez defensiva. En este aspecto Benítez sí ha trabajado con fortuna ya que en los dos encuentros que ha dirigido ha mantenido la portería a cero.

Dos empates a cero en casa ante el Manchester City y ante el Fulham es el bagaje de un Rafa Benítez que tiene prisa por encontrar buenos resultados que mejoren el ambiente de crispación de la grada. Estos dos encuentros, bastante cerrados ambos, no permiten hacer una valoración muy amplía, ni es lo que espero realizar, de su estancia en Stamford Bridge, pero sí nos dejan algunos detalles interesantes de contar.


En su primer partido, ante el Manchester City, pudimos ver la versión más defensiva del Chelsea. El sistema utilizado por Benítez fue el mismo que utilizó Di Matteo en los últimos encuentros con Obi Mikel y Ramires en el doble pivote y con Oscar, Hazard y Mata en la mediapunta. La línea defensiva fue para Azpilicueta, Ivanovic, David Luiz y Ashley Cole, de derecha a izquierda. El dominio del balón fue por completo de un Manchester City que también sufría para salir desde atrás. Ramires y Mikel se emparejaron con los dos medios del cuadro de Mancini siendo Ramires el encargado de salir sobre Touré Yayá, el más móvil y Obi Mikel sobre Barry, el más fijo. En defensa Ivanovic y David Luiz salían muchos metros de su zona para encimar las recepciones de Dzeko y de Agüero, que buscaron más la asociación que la profundidad. Por las bandas los laterales tuvieron la complicada tarea de enfrentarse a la constante movilidad de Milner y de Silva entre líneas y a la profundidad de Kolarov y de Zabaleta. En la primera parte el argentino estuvo más activo y fue la vía por la que el City consiguió llegar a la meta de Cech. En la segunda parte fue el serbio el que apareció más en ataque, pero Azpilicueta le cerró bien. En ataque apenas dispuso de ocasiones un Chelsea que echó en falta mayor actividad de sus tres mediapuntas. Desde la derecha Mata fue el más activo aunque en pocas ocasiones pudo asociarse con Torres. Hazard y Oscar estuvieron más desaparecidos, intercambiando muy a menudo posiciones. El brasileño ayudó en salida a Obi Mikel y a Ramires. Benítez dio entrada a Victor Moses y a Oriol Romeu en lugar de Hazard y de Mikel. La entrada del nigeriano se prevee habitual en las segundas partes para cambiar la tendencia del encuentro. Oriol Romeu, por su parte, busca asentarse en el once ante la necesidad de un mediocentro creador en el centro del campo blue.


Ante el Fulham vimos la versión más dominadora de un Chelsea que salió con una importante variación en el sistema. La entrada de Oriol Romeu en el once permitió al Chelsea jugar en 4-3-3 con Ramires y Oscar como interiores, con Hazard y Bertrand como extremos y con Torres en la delantera. En defensa Benítez repitió la línea de cuatro que jugó ante el Manchester City, dejando de nuevo en el banquillo a un Cahill con el que no parece contar de inicio. La entrada de Romeu permitió al Chelsea circular en el centro del campo con mayor fluidez aunque sin encontrar apenas profundidad en sus pases. La calidad del ex del Barcelona está en su efectividad en el pase, un pase casi siempre a uno o dos toques hacia adelante que apenas pierde. Su principal socio era un Oscar que aparecía prácticamente a su altura y que era el encargado de transitar para combinar con Ramires y con Hazard. Al brasileño se le notó que apenas ha jugado en esa posición tan retrasada sufriendo para filtrar pases interiores, con lo que solía retrasar el balón de nuevo hacia Romeu. En la mediapunta puede arriesgar más sus pases que actuando prácticamente como un medio más. Esta falta de profundidad obligaba a David Luiz a tener que realizar alguna salida habituales suyas con el balón controlado hasta bien entrado en campo contrario. La posición de Ramires en ataque fue la de llegador actuando por delante de Oscar buscando rematar algún centro lateral de Bertrand o de Azpilicueta. Desde los extremos el joven inglés ocupó toda la banda dejando a Cole el trabajo defensivo. Por la derecha las constantes diagonales de Hazard dejaban la banda para que la profundizara un Azpilicueta que tenía la amenaza en defensa de Rodallega. En fase defensiva el Chelsea apenas sufrió durante la primera hora larga de encuentro en la que no permitió ninguna llegada con peligro del Fulham. Las bajadas a recibir de Berbatov hasta prácticamente el centro del campo fue lo más peligroso. En el último cuarto de hora la entrada de Kerim Frei permitió al Fulham salir muy rápido a la contra con constantes diagonales en las que se impuso a Azpilicueta. Benítez, al igual que ante el City, solo realizó dos cambios. Dio entrada a Mata en lugar de Bertrand y a Marko Marin, que parece que va a contar con más oportunidades que con Di Matteo en lugar de Hazard. El alemán dejó buenas sensaciones en los pocos minutos que jugó.

Con dos empates a cero comienzan a surgir prisas por conseguir la primera victoria. Este mes de diciembre será muy importante para conocer cuáles serán sus aspiraciones en la segunda mitad de temporada. En tercer lugar a seis puntos del Manchester City y a siete del Manchester United este es el calendario que le espera hasta final de año.

Premier League: vs West Ham (1/12, F), vs Sunderland (8/12, F), vs Aston Villa (23/12, C), vs Norwich (26/12, F), vs Everton (30/12, F), vs QPR (2/1, C)

 Champions League: vs Nordsjaelland (5/12, C)

Mundial de Clubes: vs Ulsan Hyundai/Monterrey (13/12), Final* (16/12)

*En caso de ganar la semifinal

lunes, 26 de noviembre de 2012

Una salida siempre complicada

Un tanto del centrocampista bético en los primeros minutos tumbó al actual campeón de Liga.

Segunda visita a Sevilla del Madrid esta temporada y segunda derrota en ella, a la que se suma la de Getafe. Esta vez fue el Betis el que consiguió imponerse a un Madrid muy irregular, con problemas en salida de balón y sobre todo en generación de juego por dentro. El equipo local lo dio todo para hacerse con la victoria realizando un gran trabajo defensivo tanto en el centro del campo como en la defensa y poniendo en aprietos al Madrid en cada contra.

El partido se presentaba como trampa para un Madrid que venía de sellar la clasificación para Octavos de final el pasado miércoles y que comenzaba a mirar hacia el derbi de la próxima semana ante el Atlético. El Betis, por su parte, llegaba al partido después de atravesar una de las semanas más complicadas que se recuerda en los últimos años tras la abultada derrota ante el Sevilla.

Real Betis B., S.A.D. 4-2-3-1 football formationReal Madrid C.F. 4-2-3-1 football formation

Pepe Mel salió con un 4-2-3-1 en el que apostó por Salva Sevilla en la mediapunta junto a los habituales Juan Carlos y Agra. En defensa Amaya entró en lugar del lesionado Paulao y Ángel en lugar de Nelson. En la banda izquierda Alex Martínez comienza a asentarse como titular habitual. El partido comenzó según el guión esperado, el Madrid dominador buscaba los espacios a la espalda de la defensa bética, mientras que el cuadro local presionaba la salida de balón para batir al Madrid a la contra. La salida blanca no fue todo lo eficiente que se esperaba y ya son varios partidos en los que no está funcionando a pleno rendimiento. Alonso se encontraba siempre con la presencia de Salva Sevilla y sufría para no perder el balón. Por delante se encontraba Khedira, con buen trabajo en llegada pero con un déficit técnico que lastraba al Madrid en la transición. Una vez en zona de tres cuartos Ozil no encontraba ningún tipo de asociación ante las escasas diagonales de Ronaldo y de Di María. Ante esta situación la profundidad por las bandas se presumía como la única vía efectiva para llegar con peligro al área bético, pero el trabajo tanto de extremos como de laterales no dio sus frutos. La poca presencia entre líneas de Ronaldo y de Di María no se correspondió con una constante presencia en las bandas. Además Coentrao y Arbeloa apenas subieron, en gran parte por el buen trabajo de Juan Carlos y de Agra fijándoles. El Betis encontró un filón a la contra con la movilidad entre líneas de Beñat y de Salva Sevilla y los continuos desmarques de Rubén Castro buscando la espalda de centrales y de laterales.


Como ya hemos mencionado la salida de balón del Madrid fue el aspecto sobre el que comenzó a cimentarse el atasco en su juego. Como ante el Borussia Dortmund la posición de uno de los medios adelántandose hasta la altura del mediapunta para mejorar la presión fue un problema complicado de solucionar para el Real Madrid. Ante el equipo alemán Kehl realizó esa tarea, ante el Betis fue Beñat el encargado de hacerla. Como en numerosos partidos esta temporada el ex del Athletic Bilbao lideró la presión secundado a la perfección por Salva Sevilla, a su altura y por Cañas por detrás. El Betis presentó un dos contra uno ante la salida de Alonso obligando a los centrales a tener que avanzar muchos metros dejando unos espacios que después serían aprovechados por Rubén Castro a la contra. Al Madrid le costó encontrar talento entre líneas. Khedira aparecía por delante de Alonso, pero no aportaba en la generación de juego. La siguiente altura era para un Ozil muy lejos de Alonso y con pocos jugadores con los que asociarse. Benzema fue el que más se dejó caer a la mediapunta para ofrecer algún apoyo que no se convirtió en profundidad. Por las bandas Ronaldo buscaba la jugada personal con diagonales que pocas veces acababan en buen puerto. Di María por la banda derecha no encontró su sitio en ningún momento. No aportó ni amplitud cuando se necesitaba, ni movilidad entre línea para permitir a Ozil caer a banda y tener mayor campo de actuación. Ante esta situación el Madrid únicamente fue capaz de crear peligro con centros laterales que fueron solventados por un gran Adrián. El Betis se hizo grande en su campo gracias a la actuación de Cañas. Se encargó de defender a Ozil impidiéndole participar a su espalda y de realizar continuas coberturas a los centrales y a los laterales. Amaya y Dorado cumplieron por encima de lo esperado, ya que cerraron todos los desmarques de Benzema a su espalda, hecho que impidió ningún mano a mano ante Adrián. Los laterales apenas sufrieron ante las pocas entradas por banda del Madrid.



En ataque el Betis fue de menos a más a lo largo de la primera parte. Comenzó replegado, pero a partir del gol fue animándose hasta acabar creando más peligro que el Madrid. En el minuto 17 se adelantó por medio de Beñat, con un disparo colocado al palo. A partir de este momento el Madrid se volvió muy impreciso y el Betis lo aprovechó para atacar la espalda de la defensa. Beñat y Salva Sevilla recuperaron muchos más balones para que Rubén Castro buscara la profundidad. El plan previsto fue atacar la banda derecha del Madrid. En cada pérdida Rubén Castro buscaba la espalda entre Arbeloa y Pepe, secundado por Juan Carlos, buscando desborde hacia fuera y por un Alex Martínez que no se lo pensaba cuando tenía ocasión de subir. A partir de estas jugadas desde la banda llegaban una serie de centros que Salva Sevilla y Beñat buscaban rematar llegando desde segunda línea. El gol no llegó pero la inquietud de la defensa y del centro del campo madridista era mayor y al descanso se llegó con un Betis superior a un Madrid sin ideas en ataque.

La segunda parte comenzó con un doble cambio en el equipo madridista. Ante la necesidad de una mejor circulación de balón por dentro Mourinho dio entrada a Kaká y a Modric en lugar de Ozil y de Khedira. El Madrid sí mejoró en salida de balón con Modric apareciendo muy cerca de Alonso para avanzar metros, pero no fluyó como en los primeros minutos de la primera parte entre líneas. Apenas existieron combinaciones entre los Kaká, Benzema o Di María y el juego se volvió muy vertical, buscando la portería de Adrián sin apenas elaborar juego. El Madrid se mostró muy estático en este segundo tiempo llegando a romperse conforme avanzaba el encuentro. Alonso se quedó como único centrocampista en fase defensiva ante los Beñat, Salva Sevilla y compañía, con Modric por delante teniendo exclusivamente la misión de tener el balón. Como aspecto positivo para el Madrid cabe destacar que el poderío ofensivo del Betis durante el segundo tiempo fue inexistente, ya que el físico fue a menos y mantener el equilibrio defensivo fue la única prioridad de estos segundos cuarenta y cinco minutos. Rubén Castro se vino abajo y los desmarques que tanto habían puesto en problemas a la defensa blanca dejaron de existir. Los minutos continuaban avanzando y el empate no llegaba, y lo que era peor, las sensaciones no hacían presagiar que ese empate llegaría pronto. El juego directo se apoderó de un Madrid con muchas prisas para llegar arriba. La soledad de Alonso en defensa le hizo ir bajando de nivel y Ramos tuvo que asumir su papel. El central se erigió en el líder del equipo siendo el encargado de dar salida al y de llegar a finalizar algunas jugadas. El resultado no fue positivo para el equipo blanco ya que Ramos obligó a jugar muy vertical al Madrid, demasiado. Llegaba con el balón controlado hasta el centro del campo y rápidamente buscaba un pase en profundidad sobre Benzema. En el minuto 63 Mourinho agotó los cambios dando entrada a Callejón en lugar de un desaparecido Di María. Con la entrada del canterano madridista el técnico portugués buscó una mayor movilidad en tres cuartos de campo para batir las siempre juntas líneas defensivas del Betis. En el cuadro local Jorge Molina entró en lugar de Juan Carlos, con lo que Rubén Castro pasó a jugar en la banda izquierda. Con este cambio el Betis volvió a disponer de una referencia arriba sobre la que salir en largo y sobre la que limitar las incorporaciones al ataque de los defensas madridistas. Rubén Castro no sufrió en banda izquierda ante la poca presencia de Arbeloa en fase ofensiva. En el minuto 76 Pepe Mel dio entrada a Nacho en lugar de un Ángel que fue sometido a un gran desgaste físico durante todo el encuentro. En el minuto 81 Nosa entró en lugar de Salva Sevilla. El nigeriano se situó en el centro del campo y dejó la mediapunta para Beñat. El Betis ganó una intensidad defensiva que le valió para mantener la victoria. El Madrid apenas llegaba arriba. Los centros laterales continuaban siendo su única vía de llegada, pero como mencionamos anteriormente, la actuación de Adrián impidió al Madrid empatar el encuentro.

Con este resultado el Betis es quinto empatado a puntos con el Málaga y dos por encima del sexto, el Levante. El Real Madrid continua tercero a ocho puntos del Atlético Madrid y a once del Barcelona. Por detrás tiene al Málaga con cuatro puntos menos.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Un empate que vale un pase a Octavos de final



Buen partido el que nos depararon los dos grandes equipos de este grupo F que con la clasificación sellada para Octavos de final con la victoria del Lille frente al BATE Borisov se enfrentaban para dirimir quién sería primero de grupo. A pesar del empate final el partido debe de servir para reconciliar al Valencia con su afición después de un complicado inicio de temporada en el que los buenos resultados brillaron por su ausencia. El Bayern continúa con su racha de buenos resultados y salvo un tropiezo ante el BATE Borisov se asegura la primera plaza de grupo.

Los dos equipos salieron con su habitual 4-2-3-1. Pellegrino sorprendió con varias novedades en el once. Guaita entró en la portería.  Barragán entró en lugar del lesionado Pereira. Por delante Parejo sustituyó a Gago y en la mediapunta apareció Banega por primera vez como titular después de su lesión, relegando a Jonas al banquillo. Heynckes, por su parte, dio entrada a Badstuber en el eje de la defensa en detrimento de Boateng y a Pizarro en la delantera en lugar de Mandzukic.

Valencia C.F., S.A.D. 4-2-3-1 football formationFC Bayern München 4-2-3-1 football formation

El partido comenzó de forma muy parecida al de la ida, con un Bayern poseedor del balón y con el Valencia replegado buscando la contra. Lo que cambió fue la intensidad defensiva del cuadro ché en todas las zonas pero especialmente en el centro del campo. El trío formado por Parejo, Tino Costa y Banega realizó una presión a la salida de balón del Bayern Munich que condicionó todo el juego del cuadro alemán en gran parte del partido. Ante la imposibilidad para salir por dentro el Bayern se vio obligado a utilizar las bandas para salir, como viene haciéndolo mayoritariamente esta temporada. La debilidad de la defensa valencianista estaba claramente por la banda derecha. La presencia de Barragán que desde el principio comenzó a generar dudas en sus enfrentamientos ante Ribery incitaba al cuadro alemán a atacar constantemente por allí. Contra todo pronóstico no fue así y el Bayern no pudo encontrar la superioridad esperada debido en gran medida a dos aspectos: el buen rendimiento por alto de Ricardo Costa y de Rami evitando remates de Pizarro y la presencia de Feghouli que además del importante trabajo defensivo que realizó suponía una constante amenaza a la espalda de un Alaba que no pudo soltarse todo lo que quiso en ataque. Por la otra banda Lahm sí intentó salir para llegar a línea de fondo y centrar ya que el juego entre líneas de Muller y de Kroos fue prácticamente inexistente. El buen trabajo de Guardado y de Cissokho en defensa impidió que el Bayern creara peligro con cierta regularidad. Ante estos problemas para llegar a la portería de Guaita el Bayern quedó a expensas de las jugadas personales de Ribery entre líneas. El Valencia buscó un juego muy directo sobre Soldado para que aparecieran Banega y Tino Costa entre líneas y buscaran el pase en profundidad o  el disparo desde fuera del área. Feghouli también estuvo activo en la primera parte, aunque no fue hasta la segunda cuando destacó por encima de los demás.


A pesar de no ser determinante la salida por dentro del Bayern Munich el primer pase casi siempre de Schweinsteiger sobre un jugador adelantado ya sea por dentro o por fuera sí lo es. La presencia de Kroos en la mediapunta siempre aporta una tercera pieza para ayudar a los mediocentros en caso de no poder realizar la circulación con garantías de triunfo. Para defender a este trío en salida Pellegrino dio entrada a Banega en lugar de Jonas para aprovechar la mayor capacidad de retroceso del argentino, más acostumbrado a vivir cerca del círculo central que del área. En defensa Tino Costa adelantó su posición situándose a la altura de Banega saliendo a tapar a Schweinsteiger y a Javi Martínez. Por detrás Parejo se encargaba de equilibrar el centro del campo cerrando a Kroos. En ataque Banega actuaba claramente en la mediapunta, con Tino Costa a la altura de Parejo. La generosidad en defensa de los tres fue el punto sobre el que comenzó a solidificarse la superioridad valencianista ya que las incorporaciones de Schweinsteiger adelantando metros para intentar generar ventajas en otras zonas más adelantadas eran cerradas con continuaciones en la marca de Banega y de Tino Costa, alternándose de tal manera que en ningún momento se quedaba solo. Feghouli y Guardado también tenían una parte de importancia en este sistema defensivo  ya que además de encargarse de cerrar al lateral se venían hacia adentro en ocasiones para impedir que el Bayern avanzara metros. Por esta razón Dante se veía obligado a jugar en largo sobre Pizarro para poder llegar al área valencianista y sobre todo para evitarse alguna pérdida innecesaria que le costara un gol.

La primera parte acabó con empate a cero después de que las ocasiones brillaran por su ausencia. La expulsión de Barragán fue la acción más destacada del encuentro, lo que obligó a Feghouli a hacerse cargo por completo de la banda derecha.


Pocas veces vemos en un partido un desgaste físico tan alto como el de Feghouli en la segunda parte. El tener que encargarse de toda la banda no le impidió aparecer en ataque y fue un constante sube- baja durante los segundos cuarenta y cinco minutos. Si el Bayern tenía un filón al principio del partido por esta banda ahora sin la presencia de Barragán este filón se hizo todavía más grande. Pero al igual que en el primer tiempo las pocas presencias de Alaba en ataque y las continuas diagonales de Ribery impidieron penalizar al Valencia por banda derecha. Otro de los aspectos a destacar en defensa fue las constantes ayudas de Rami o de Tino Costa o de Banega para ocupar la posición de Feghouli cuando el marroquí se encontraba regresando de la acción de ataque. En el juego ofensivo el extremo ché fue muy importante ya que fue la principal vía sobre la que el Valencia conseguía salir tras recuperar el balón. En el minuto 77 su trabajo fue recompensado con el primer gol de la noche.  Partiendo desde la derecha regateó a dos contrarios y con la zurda batió a Neuer después de que Dante desviara el balón. Con este gol Feghouli ya sí se centró únicamente en labores defensivas.

El partido se abrió en su segunda parte y es que el Valencia viéndose clasificado y sin sufrir apenas en la primera parte salió a por la victoria. El trío Banega- Parejo- Tino Costa comenzó a funcionar en ataque con combinaciones que permitían al Valencia tomarse un respiro en defensa y buscar bien a Soldado por dentro o a Feghouli y Guardado por fuera. El Bayern se volvió más vertical al tener más espacios entre líneas, pero las acciones de peligro no llegaban. Schweinsteiger fue el jugador que más intentó encontrar las ocasiones con constante movilidad entre líneas tanto por la mediapunta como por bandas doblando a los extremos. Heynckes se vio obligado a realizar un doble cambio en el minuto 66 dando entrada a Shaqiri y a Mandzukic en lugar de Kroos y de Pizarro. El suizo actuó en la mediapunta para mejorar la presión a la salida de un Valencia que cada vez se hacía más fuerte. El croata salió para conseguir rematar alguno de los centros servidos por los extremos, en la que era la única vía de llegada a la portería de Guaita.  En el 71 dispuso de su mejor ocasión enviando al palo un centro lateral. Pellegrino también optó por realizar cambios y dio entrada a Jonas en lugar de Parejo un minuto antes del gol de Feghouli. Tras este gol Albelda entró en lugar de Banega. El brasileño actuó en banda derecha por delante de Feghouli. El técnico del Bayern acabó el partido con todo lo que tenía, con Mario Gómez entrando en lugar de Ribery, pasando a jugar con un 4-4-2. Muller pasó a jugar en banda izquierda y Shaqiri en la derecha. A pesar de no merecerlo Muller empató el partido en el minuto 82 al rematar otro centro lateral. Con este gol el partido disminuyó en intensidad y el empate pareció convencer a ambos en un partido muy luchado que supuso un importante desgaste físico para todos los jugadores. Pellegrino agotó sus cambios dando entrada a Valdez en lugar de Guardado, pero el empate ya fue inamovible.

Con este empate el Bayern Munich continúa líder con diez puntos seguido por el Valencia con la misma puntuación. Con seis está el BATE Borisov que irá a la Europa League y con tres cierra el Lille. El Bayern depende de sí mismo para ser primero de grupo, mientras que el Valencia debe de conseguir un punto que más que el cuadro alemán en la última jornada.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Un empate que deja contento a ambos equipos

El guardameta alemán no pudo evitar el 2-2. La falta iba bien tocada por Özil, pero algunos pueden pensar, con razón, que el portero pudo hacer más.

Partidazo de nuevo el que pudimos disfrutar entre los actuales campeones de la Bundesliga y de la Liga BBVA. Como en Alemania el primer tiempo fluyó por unos cauces en los que el Dortmund se encuentra en su salsa: intensidad, verticalidad y un carácter emocional que hace crecerse al equipo de Klopp en este tipo de partidos. El encuentro disputado el martes en el Santiago Bernabéu no fue más que la constatación de un pase a Octavos de final por parte de ambos equipos de forma muy merecida. Dortmund y Madrid acabaron contentos, ya que el primero se afianza en el liderato del grupo y el segundo consiguió un empate en los últimos minutos muy valioso para dejar completamente descolgado al Manchester City y al Ajax.

Ambos equipos salieron con su habitual 4-2-3-1 de inicio. Mourinho dio entrada a Arbeloa en la izquierda, recuperado de su lesión, dejando como en los últimos encuentros el puesto de central a Pepe y a Varane y el lateral diestro a Sergio Ramos. Modirc actuó en el mediocentro en lugar de un lesionado Khedira y arriba Higuaín se aprovechó de los problemas físicos de Benzema para salir de inicio. Klopp, por su parte, salió con su habitual once en el que solo destacaban las entradas de Gundogan y de Grosskreutz en lugar de Bender y de un Blaszczykowski que continúa lesionado.

Real Madrid C.F. 4-2-3-1 football formationBorussia Dortmund 4-2-3-1 football formation

El partido comenzó con una imagen parecida al encuentro disputado hace dos semanas en el Signal Iduna Park. El Madrid intentaba proponer el juego saliendo desde atrás, mientras que el Dortmund buscaba las contras con una presión muy adelantada comenzada por Gotze y por Lewandowski. El Real Madrid sufría para avanzar metros y para encontrar líneas de pase por delante, mientras que el cuadro alemán creaba peligro sobre la meta de Casillas. Ozil debía de ser el hombre que liberara a Modric y a Xabi Alonso de esta presión tan intensa. Kehl adelantaba su posición para situarse en ocasiones a la altura de Gotze y de Grosskreutz, mientras que Gundogan estaba más centrado en realizar coberturas a las bandas. Por el centro se originó un espacio entre el centro del campo y la línea de centrales sobre el que Ozil podría haber castigado al cuadro alemán, bien obligando a retrasar su línea de presión, o bien penalizándole con llegadas a la meta de Weidenfeller. Con el alemán desactivado y sin salidas por dentro el Madrid confiaba todo su juego de ataque en las diagonales de Cristiano Ronaldo y de Di María. La buena situación del Dortmund en defensa y la poca aportación de Ramos y de Arbeloa en ataque ante las continuas amenazas de Reus y de Grosskreutz en banda provocaron que las llegadas no fueran nada claras. Arriba un Higuaín tocado apenas recibió balones. El Dortmund tuvo dos opciones con las que llegar a la portería de Casillas durante la primera parte y en ambas superaron a la defensa madridista. La primera opción era la contra sobre la pérdida madridista. La movilidad de Gotze y sus combinaciones con Reus desajustaron a la defensa blanca en numerosas ocasiones. Por banda izquierda el vertical Grosskreutz buscaba la espalda a Ramos. De esta forma Reus adelantó a su equipo en el minuto 28. El Madrid no tardó en responder  y seis minutos después puso el empate por medio de Pepe a la salida de un corner. A pesar del empate el Borussia continuó dominando el partido y en esta parte con la salida en largo sobre Lewandowski. La superioridad aérea del polaco sobre Varane propició una buena vía de salida para el Dortmund cuando sus recuperaciones de balón no eran demasiado cercanas al área. En el minuto 45 gracias a un envío en largo sobre Lewandowski consiguió el empate por medio de un Arbeloa que pugnaba con Gotze por hacerse con el balón.

 
Como hemos mencionado anteriormente la salida del Madrid fue la clave sobre la que se gestó este primer tiempo, al igual que gran parte del encuentro de ida. La entrada de Modric en el once en lugar de Essien respondía a una mejora en la circulación de balón para minimizar el número de pérdidas y tener más asociaciones por dentro con Ozil. En el planteamiento la entrada del croata estaba clara pero en la práctica no tuvo los resultados esperados. Modric y Alonso aparecieron en paralelo en la base de la jugada, bastante separados y con un dos contra dos constante contra Gotze y Lewandowski más las ayudas de Kehl. Alonso se limitaba a jugar en paralelo con Modric y el croata, mucho más vertical que el español, se veía obligado a tener que avanzar metros. La esperada conexión con Ozil no llegó ante la poca participación del mediapunta alemán, que no consiguió aparecer ni por delante ni por detrás de los mediocentros. Por tanto la sociedad Modric- Ozil que debía liderar al Madrid sucumbió por la intensa presión del Dortmund y por la separación que hubo entre ambos. Por bandas Ramos y Arbeloa tampoco apoyaron a los medios saliendo por las bandas por lo que el Madrid se ahogó en esta zona del campo.

La segunda parte comenzó con dos cambios en el Madrid y con uno en el Dortmund, no de jugadores, sí de intenciones. Mourinho dio entrada a Callejón y a Essien en lugar de Higuaín y de Modric. El sistema madridista se mantuvo porque Ronaldo pasó a jugar como hombre más adelantado. Ante las pérdidas de Modric en salida de balón el técnico madridista optó por ser más vertical e intenso en el centro del campo con la entrada del ex del Chelsea. Klopp replegó a su equipo permitiendo al Madrid jugar con más comodidad en campo contrario.


La entrada de Callejón fue la mejor noticia del partido para el Madrid y es que el canterano ofreció una profundidad que no había encontrado en toda la primera parte. Tuvo tres ocasiones en el primer cuarto de hora, en una salida muy típica del Madrid en Champions. La primera acabó en gol anulado por fuera de juego, la segunda se marchó cerca del palo y la tercera fue parada por Weidenfeller. Gran parte de culpa de esta salida en tromba del Madrid fue suya. Otro que tuvo parte de esta culpa fue un Ronaldo que realizó el trabajo sucio para que Callejón se plantara ante el meta alemán. Partiendo desde el centro su movilidad fue constante en la segunda parte propiciando unos espacios de los que se aprovechó en gran medida Callejón. Como vemos en la jugada del gol anulado Ronaldo cae sobre la banda izquierda y Callejón aprovecha el espacio por el centro para atacarlo. Piszczek no cierra con totales garantías ante la presencia del portugués en banda y Subotic pierde por un momento su referencia inicial que en este momento pasa a ser el español. Un momento de confusión que deja a Callejón cara a cara con el portero.

Pero no solo de este cambio de posiciones vivió el Madrid en la segunda parte. Ozil comenzó a aportar la movilidad que se le espera cayendo sobre la banda derecha, permitiendo a Di María desbordar por dentro. El argentino también dispuso de varias ocasiones que no encontraron portería. En este comienzo de segundo tiempo el Borussia se vio completamente superado. Conforme avanzaban los minutos el Madrid fue apagándose poco a poco conocedores de la dificultad de mantener este nivel de intensidad durante los cuarenta y cinco minutos. Las apariciones sobre la meta de Weidenfeller dejaron de llegar con tanta asiduidad. El Dortmund no pudo replicar al Madrid en toda la segunda parte ya que el equipo se centró en el trabajo defensivo y  las recuperaciones en posiciones más lejanas que en la primera parte impidieron salidas en largo para que los mediapuntas inventaran algo. La presencia de Essien en el centro del campo limitó todavía más estas transiciones. Hasta el minuto 74 no realizó Klopp su primer cambio dando entrada a Bender en el centro del campo en lugar de Reus. Mourinho que necesitaba puntuar si no quería jugarse el pase en Manchester dio entrada en el minuto 77 a Kaká en lugar de Arbeloa. El Madrid pasó a jugar con un 3-4-1-2 con Pepe, Ramos y Varane en defensa, Alonso y Ozil en el mediocentro, Kaká en la mediapunta, Essien por banda derecha, Di María por izquierda y arriba Callejón y Cristiano Ronaldo. El Bernabéu se volcó con el equipo en los últimos diez minutos buscando un arreón final que les diera el empate o incluso la victoria. Klopp que se veía superado físicamente dio entrada a Perisic en lugar de Gundogan. Gotze pasó a jugar en banda derecha con menor trabajo defensivo y el croata ocupó la mediapunta siendo el principal defensor de la salida de balón del Real Madrid. Los minutos pasaban y las ocasiones no llegaban. No llegaron hasta el minuto 89 cuando Ozil empató el partido con un disparo de falta colocado al palo. El partido no dio más de sí. Klopp dio entrada a Leitner en lugar de Gotze para evitar otra remontada épica del Madrid que esta vez no llegó.

El empate deja a los dos equipos en lo más alto del clasificación con el pase a Octavos de final bastante encarrilado. El Borussia Dortmund es líder con ocho puntos seguido del Real Madrid con siete. Con cuatro en puesto de Europa League está el Ajax. Cierra con dos un Manchester City prácticamente eliminado.

sábado, 27 de octubre de 2012

Una victoria que confirma su buen comienzo en Champions



Por fin lo consiguió. Después de poner contra las cuerdas a la Juventus en su estadio en su primer partido de Champions ante un grande de Europa, aprovechó la visita del vigente campeón de la última edición para conseguir una victoria que le aúpa a lo más alto del grupo y que le deja con un pie en Octavos de final. Llevados en volandas por su afición el Shakhtar consiguió imponer su dominio durante todo el encuentro y es que a pesar de adelantarse muy pronto en el marcador sus intenciones siempre fueron las de ir a buscar otro gol más. El Chelsea se aprovechó del tropezón de la Juventus en Dinamarca para continuar en los puestos que dan acceso a los Octavos de final.

Shakhtar Donetsk 4-2-3-1 football formationChelsea 4-2-3-1 football formation

En el Donbass Arena Shakhtar Donetsk y Chelsea se enfrentaban en uno de los duelos más apasionantes de la tercera jornada de la fase de grupos. El empate a cuatro puntos permitía que el ganador de este partido se postulase como claro favorito a lograr la victoria en el grupo. Lucescu repitió el 4-2-3-1 que logró el empate ante la Juventus con una línea de tres mediapuntas encargada de desequilibrar el juego y con dos laterales encargados de dar profundidad la banda. Di Matteo, por su parte, salió con el habitual 4-2-3-1 en el que volvió a apostar después de varios partidos por Ramires en banda derecha, lo que supuso que Mata jugara en la izquierda y que Hazard viera los primeros minutos desde el banquillo. El comienzo del encuentro no pudo ser mejor para el cuadro local que se encontró con el primer gol a los tres minutos por medio de Teixeira después de un rechace de Terry a disparo de Willian. Este comienzo tan favorable al equipo ucraniano dejó de ser sorprendente en cuanto los minutos pasaban y el dominio del Shakhtar era cada vez mayor debido a los problemas del Chelsea en salida de balón y a las intenciones ofensivas del sistema planteado por Lucescu. Willian era el encargado de dirigir el juego ofensivo partiendo desde la banda izquierda para acabar donde y de la forma que quisiera. Secundado por unos grandes Teixeira y Fernandinho y otros más discretos y trabajadores como Mkhitaryan y Luiz Adriano el equipo local pasó claramente por encima en la primera parte al actual campeón de Europa. Los problemas acrecentaron en el equipo de Di Matteo tras la lesión de Lampard en el minuto 18. En su lugar entró el belga Hazard por lo que Ramires se vio obligado a retrasar su posición. Hazard ocupó la banda izquierda pasando Mata a jugar en la derecha. El Chelsea en ningún momento tuvo fluidez en su juego y es que las escasas apariciones sobre campo ucraniano se saldaron con balones largos a un Torres muy solo o con jugadas individuales de cada uno de los mediapuntas que no llegaron a buen puerto.


El Shakhtar Donetsk dominó por completo el encuentro en su primera parte desde la salida de balón hasta llegar al área de Cech. La salida era realizada preferentemente por medio de los laterales que se pegaban a la línea, situándose en paralelo con los centrales. La misión tanto de Srna como de Rat era transportar el balón hacia Fernandinho en campo de ataque y posteriormente buscar el dos contra uno con el extremo. Esta salida fue muy utilizada ante la presencia de Mata y Hazard como defensores de los laterales. Si la salida por los laterales no daba resultado Fernandinho retrasaba un poco su posición y Rakitskiy se encargaba de hacerle llegar el balón. Una vez con él la opción de abrir a las bandas se presentaba como la más apetecible gracias a la cantidad de jugadores que se sumaban al remate. Como vemos en la imagen tanto el delantero, como el mediapunta, como el extremo de la banda que ha doblado Srna están haciendo un tres contra tres para recibir el centro del croata. La presencia en zonas muy avanzadas de Rat por la otra banda impide a Ramires irse a ayudar a los tres defensas para conseguir superioridad. En el mediocentro Fernandinho era el encargado de elaborar juego en salida y en zona de tres cuartos descolgándose constantemente de Hubschman llegando a rematar jugadas desde segunda línea. El mediocentro checo se encargaba únicamente de labores defensivas tales como ayudar a los centrales ante las subidas de los laterales y equilibrar el centro del campo para que no se rompiera a pesar de la cantidad de hombres con la que atacaba.


Caso aparte merece la actuación de Willian, el jugador más desequilibrante del Shakhtar el la zona de tres cuartos. Partiendo desde la banda izquierda su constante movilidad, su visión de juego y sus disparos a puerta provocaron absoluto pánico en una defensa londinesa que no estuvo preparada para defenderle como merece.La diagonal desde la izquierda para disparo con la derecha fue una jugada que repitió el jugador brasileño en varias ocasiones aunque sin fortuna de cara a gol. pero la jugada con la que provocó el desequilibrio absoluto fue en el dos contra uno en banda con Rat dejando la banda para el lateral rumano mientras que él buscaba la zona central para filtrar pase a la espalda de los centrales. Su labor a la espalda de los mediocentros y la de Mkhitaryan a la espalda de los centrales fue clave para que el Chelsea se viera completamente superado en esta zona del campo. Las diagonales hacia adentro de Willian no pudieron ser paradas por un centro del campo londinense que buscaba subir la línea para entorpecer lo máximo posible la salida de balón. Mkhitaryan dejaba la zona libre y se situaba en paralelo a Luiz Adriano buscando un dos contra dos a la espalda de la defensa, por lo que los centrales no podían salir sobre Willian y el brasileño campaba a sus anchas por la mediapunta. Luiz Adriano realizó el trabajo más oscuro de todos los jugadores de ataque ya que apenas pudo brillar de forma individual si bien ofreció en determinadas ocasiones apoyos en el pase a sus compañeros. Teixeira sin llegar a asumir la responsabilidad de Willian estuvo muy activo por dentro ante las constantes subidas de Srna.

Con la victoria por la mínima del equipo local se llegó a un descanso en el que la diferencia en el marcador debió de haber sido mayor.

La segunda parte comenzó con un Chelsea con intenciones algo más ofensivas que rápidamente fueron penalizadas por el Shakhtar Donetsk. En una contra Fernandinho aprovechó un pase de Luiz Adriano para poner un 2-0 que encarrilaba el partido. El Chelsea continuó a pesar del gol inicial con el guión previsto por Di Matteo en el descanso, pero las carencias en la salida de balón continuaron evidenciándose ante la imposibilidad de Obi Mikel y de Ramires de conectar con unos mediapuntas que se veían obligados a comenzar la jugada para mejorar la fluidez del juego. El Shakhtar esperaba y rápidamente salía a la contra, por lo que ni los centrales ni los laterales pudieron arriesgar en exceso su posición. Los balones no llegaban a Torres y los constantes cambios de posiciones entre Mata, Hazard y Oscar no parecían ser la solución para que el Chelsea remontara el partido. En el Shakhtar comenzó a emerger la figura de Hubschman cortando el juego entre líneas del cuadro londinense para salir a la contra aprovechando la velocidad de Willian y de Teixeira. Di Matteo no realizó ningún cambio hasta el minuto 70 cuando dio entrada a Sturridge en lugar de Torres para tener en la punta a un delantero mucho más asociativo. Aunque con problemas el Chelsea comenzó a llegar algo más a la portería de un Pyatov que solventaba los acercamientos londinenses sin apenas apuros. Lucescu no optó por dar entrada a Ilsinho hasta el minuto 82 en lugar de Teixeira para continuar penalizando a la contra las pérdidas del Chelsea con un jugador más fresco. En el minuto 88 fue Douglas Costa el que entró por la estrella de la noche, un Willian que poco más podía hacer a estas alturas de partido. El Chelsea cada vez atacaba con más hombres y el minuto 88 el serbio Ivanovic consiguió conectar con Oscar para hacer un 2-1 que hizo albergar esperanzas de empate hasta el final. Un final que llegó con este resultado y que da al Shakhtar Donetsk un auténtico golpe de moral para afrontar la segunda parte de esta fase de grupos.


Con este resultado y el empate de la Juventus con el Nordsjaelland el grupo queda liderado por el Shakhtar Donetsk con siete puntos. Segundo con cuatro es el Chelsea. Tercero y cuarto son la Juventus y el Nordsjaelland con tres y un punto respectivamente.