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sábado, 30 de junio de 2012
Eurocopa 2012: Semifinales I
España es la primera finalista de la Eurocopa después de imponerse a Portugal en la tanda de penaltis. Al igual que hace cuatro años ante Italia, en un partido similar, Fábregas y Casillas fueron decisivos en la victoria española. También cabe reseñar el lanzamiento de penalti a lo panenka de Ramos para callar todas las críticas recibidas tras su fallo en semifinales de Champions ante el Bayern Munich.
En el Donbass Arena de Donetsk Portugal y España se enfrentaban con los Octavos de final del pasado Mundial 2010 como punto de partida. Portugal llegaba eufórica, de menos a más, en un torneo que había comenzado muy cuesta arriba para ellos. España, por su parte, llegaba bastante expectante después de imponerse sin apenas sufrimiento de Francia.
Paulo Bento repitió su 4-3-3 habitual en el que Almeida entró en lugar del lesionado Postiga. Del Bosque, por su parte, salió también con su habitual 4-3-3 en el que Alonso y Busquets formaron un doble pivote con Xavi por delante. En la delantera apostó por Negredo en lugar de los habituales Torres o Fábregas.
El comienzo del partido nos fue marcando cuáles iban a ser las directrices por las que discurriría el encuentro. España intentó ser fiel a su estilo de teniendo la posesión, mientras que Portugal ejerció una intensa presión en la salida de balón evitando que el balón llegara con facilidad a los jugadores de tres cuartos. Todo comienza a explicarse desde la pareja Busquets- Alonso. Eran los primeros encargados en superar las líneas de defensa y fueron los primeros en toparse con la presión portuguesa. Formaron un doble pivote bastante móvil, jugando Xavi por delante e incorporándose al ataque uno de los dos según pedía la acción. La presión ejercida por Meireles y Moutinho originó problemas para hacer llegar el balón a un Xavi bien cubierto por Veloso, lo que hacía que la posesión tuviera que volver atrás para que los centrales despejaran mediante balones largos que impedían a España controlar el juego. En bandas Iniesta y Silva aparecieron de forma esporádica y muy lejos de su zona de peligro. Iniesta consiguió asociaciones con Jordi Alba para generar las únicas superioridades de todo el encuentro. Silva, por su parte, apenas se vio ayudado por un Arbeloa encargado de parar a Cristiano Ronaldo. Arriba Negredo se encontró muy solo ante el poderío físico de los centrales portugueses, lo que le complicó participar en el juego. Apenas un par de apoyos de espaldas fue su aportación en el partido. Portugal tenía el partido donde quería. La presión en el centro del campo evitaba la salida jugando de España y sus posteriores balones largos eran despejados por Pepe y Bruno Alves. La salida jugada de Portugal también se vio dificultada por la presión de España, lo que les hizo optar por salidas en largo sobre Ronaldo y Almeida. En estas jugadas comenzaron a surgir las figuras de Ramos y Piqué, impecables durante todo el encuentro, tanto por alto, como en el uno contra uno, como en las coberturas. Cristiano Ronaldo era la gran esperanza en el ataque portugués para desequilibrar un partido muy igualado. El jugador del Real Madrid se topó con Arbeloa siempre que aparecía por banda, con ayudas de Piqué y cuando lo hacía por dentro Ramos y Busquets le impidieron progresar. Un disparo fuera fue su aportación en la primera parte. España llegó a base de disparos lejanos a la meta de Rui Patricio. Arbeloa e Iniesta cerca estuvieron de encontrar portería. Con esta igualdad se llegaba al descanso.
La segunda parte continuó por los mismos derroteros que la primera y es que Portugal llegó a dominar durante el primer cuarto de hora. La presión de Moutinho y Meireles continuaba haciendo estragos en la salida española y los desmarques a espalda de la defensa de Hugo Almeida y de Cristiano Ronaldo pusieron en aprietos a la defensa. La definición falló en el delantero del Besiktas para haber adelantado a su selección en el marcador. Ronaldo pasó a jugar por dentro, buscando la espalda a los centrales ante la imposibilidad de progresar por banda. Tampoco estuvo afortunado y acabó el segundo tiempo intentando desbordar a Jordi Alba. En el minuto 54 Del Bosque realizó el primer cambio dando entrada a Fábregas en lugar de un Negredo cada vez menos participativo. Con ésto se intentaba conseguir una pieza más para combinar entre líneas y conseguir superioridad y para hacer salir a Pepe y a Bruno Alves de su zona de influencia. El centrocampista del Barça, sin llegar a hacer un gran partido, ofreció buenos apoyos, sobre todo a Iniesta, y se aprovechó de la poca influencia de Xavi en el juego para asumir mayores responsabilidades. Los centrales portugueses continuaron imperiales y castigaron cada recepción de espaldas. A los 60 minutos Jesús Navas entró en lugar de un Silva, que fue a menos conforme avanzó el encuentro. El jugador del Sevilla se encontró con un problema similar que ante Croacia: la inexistencia de un nueve. Realizó un buen trabajo defensivo al convertirse en una amenaza constante a un Coentrao que estaba creando problemas cuando profundizaba por banda. En ataque apenas aportó ya que no participó en las combinaciones por dentro, y por fuera tan solo recibía pases en profundidad complicados de ganar y cuando eran ganados la falta de un delantero le impedía buscar el centro lateral. Para entonces España había vuelto a asumir las riendas del encuentro. Portugal comenzó a notar el desgasta físico y su línea de presión se retrasó algo, permitiendo a España salir con facilidad hasta el centro del campo. Una vez allí la línea de tres centrocampistas impedía la circulación por dentro y obligaba a Alba a profundizar por banda para llegar a portería. En este contexto algo más favorable para Xavi que en la primera parte comenzaron a evidenciarse los problemas físicos que viene arrastrando a lo largo de la competición. No fue el líder del centro del campo e Iniesta tuvo que acudir al rescate. Aunque fue en la prórroga cuando se destapó definitivamente en estos últimos minutos fue asumiendo mayor responsabilidad en tres cuartos de campo. En Portugal Oliveira entró en lugar de Hugo Almeida, en el minuto 81 y en España Pedro lo hizo en lugar de Xavi, en el 87. Con este cambio Pedro pasó a ocupar la banda izquierda dejando a Iniesta en el centro asumiendo la batuta del equipo en los últimos minutos. España tan solo disparó una vez a puerta en toda esta segunda parte, mientras que Portugal lo hizo varias veces sin encontrar portería. Con este empate justo se llegaba a una prórroga en la que España demostró su mejor juego en el partido.
La prórroga tuvo un claro dominio español. Dejó de lado el fútbol control que realiza habitualmente para aprovechar los espacios dejados por Portugal a la espalda de los centrocampistas. Iniesta apareció por dentro con sus conducciones habituales rompiendo líneas de presión y por banda Pedro y Alba, por la izquierda y Navas, por la derecha abrieron el campo y desequilibraron el juego. La banda izquierda asumía la mayor parte del juego del equipo con la electricidad de Pedro y la velocidad de Jordi Alba. Iniesta tuvo la ocasión más clara del encuentro, pero se topó con Rui Patricio. Portugal apenas combinaba y fiaba su juego de ataque en balones largos a Ronaldo. En el minuto 106 Custodio entró en lugar de un Veloso muy cansado de presionar durante todo el encuentro. Se situó como pivote defensivo y se encargó únicamente de marcar a Iniesta. En el minuto 113 Varela entró en lugar de Meireles, un cambio ofensivo cuando peor estaba en el partido. Custodio pasó a formar un doble pivote junto a Moutinho, con Nani en la mediapunta y Ronaldo y Varela en bandas. A pesar de las acometidas de España el partido llegó a una tanda de penaltis que decidiría el primer finalista de esta Eurocopa.
Xabi Alonso abrió la tanda topándose con Rui Patricio. En el siguiente Moutinho se encontró con un Casillas que aparece siempre en los momentos clave. Iniesta y Nani anotaron los suyos a parte de dos centrales nada habituales en estos lanzamientos como son Piqué y Pepe. Ramos se redimió de su fallo ante el Bayern Munich en la semifinal de Champions anotando un penalti a lo panenka. Bruno Alves se encontró con el larguero y dio la oportunidad a España de estar en la Final. Fábregas se encontró como ante Italia en 2008 con la responsabilidad de sentenciar la tanda a favor de España. Al igual que ese día no falló y España será la primera finalista de la Euro.
Con esta victoria España jugará su segunda final consecutiva de Eurocopa frente al ganador del Alemania- Italia el domingo a las 20:45 en Kiev
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